Formación

María Méndez Orense estudió en el Colegio San Antonio María Claret de Sevilla. Es Graduada en Filología Hispánica y Doctora en Estudios Filológicos por la Universidad de Sevilla.

Un día en la vida de un científico

Tenemos la suerte de trabajar en uno de los edificios más bonitos y representativos de Sevilla, la antigua Real Fábrica de Tabacos, que hoy alberga el Rectorado de la Universidad de Sevilla, así como las facultades de Filología e Historia.

La actividad en la universidad combina la docencia, la investigación y la gestión. Por tanto, depende de si ese día tenemos que atender una o varias de nuestras dimensiones. Si fuera uno de esos días en los que no hay clases y las gestiones están aparcadas y puedo así prepararme para el próximo congreso al que voy a asistir, empezaría temprano a buscar la bibliografía que necesitara, bien en línea, bien en la biblioteca (tomando nota de las signaturas para el próximo paseo hasta allí) e iría preparando un documento de base con esos títulos. A veces el tema no es nuevo y entonces puedo tirar del hilo de una previa para la que ya había hecho ciertas lecturas y, por tanto, empezaría desde ahí. Las lecturas irían seguidas de la anotación de las ideas principales, apuntando siempre las páginas o los párrafos más interesantes para luego poder citar convenientemente. Normalmente para ello uso directamente el word, aunque siempre he preferido el papel tanto para leer como para escribir. El estudio continúa con los análisis documentales, cuyo corpus hay que decidir y preparar. Esa es la parte en la que el investigador se siente el buscador de tesoros, sumergido en la biblioteca o en el archivo para dar con el texto más adecuado para sus objetivos. Y después de encontrarlo, toca el análisis exhaustivo, que a veces lleva horas pues los diferentes fenómenos pueden solaparse y solo un examen concienzudo es capaz de mostrar los niveles en los que funciona cada uno. Y luego toca redactar, extraer conclusiones y valorar. Por supuesto, todo esto se hace atendiendo además a las necesidades fisiológicas del ser humano, así que no podría dar todos esos pasos el mismo día, si bien con frecuencia ocurre que de repente está oscureciendo.

Aficiones

Me gusta mucho leer, escribir y escuchar música (soy fan de Taylor Swfit y Rosalía, menuda combinación). Disfruto mucho del deporte y me gusta salir de excursión, nadar y jugar al pádel. Además, he tenido la suerte de viajar mucho: he vivido algunos meses en ciudades como Berlín, Edimburgo o Tokio.

Centro o departamento

Departamento de Lengua Española, Lingüística y Teoría de la Literatura.

Línea de investigación en la que trabaja actualmente

Las líneas pueden resumirse en: Historia del español y edición de textos hispánicos; Variación y variedades lingüísticas; Análisis del discurso, lingüística textual: pragmática, sintaxis y marcación del discurso en su perspectiva histórica.

Actualmente mi grupo de investigación se centra en el español moderno que empieza en el último cuarto del XVII, atraviesa el XVIII y se extiende hasta el XIX. Yo me he interesado especialmente por los primeros textos que se escribieron en España sobre economía (una ciencia que empieza a despuntar en la época de Cervantes, Quevedo y Góngora) y por los inicios de la prensa en los siglos XVIII y XIX. También me gusta mucho el análisis de partículas discursivas, como una que los jóvenes de hoy conocen muy bien: «en plan».